7 de abril de 2014

Científicos se acercan a la creación de vida sintética

Por primera vez se consiguió crear desde cero un cromosoma eucariota sintético, el mismo tipo de célula que constituye al ser humano.

Como recordarás de tus clases de biología, existen dos tipos de células, las procariotas, que constituyen a los organismos unicelulares, y las eucariotas, más complejas, que forman a organismos como los hongos, plantas y animales, incluyéndonos. Desde hace algún tiempo ya es posible manipular viruses y alterar el genoma de una bacteria, pero por primera vez se consiguió crear un cromosoma eucariota 100% artificial nunca antes visto en la naturaleza.

La investigación, publicada en la revista Science, da crédito a 80 científicos provenientes de 16 instituciones distintas, algunos de ellos estudiantes de posgrado. El título del trabajo es “Síntesis Total de un Cromosoma Eucariota con Diseño Funcional”.

El organismo para el que se diseñó el cromosoma es una levadura, de la cual no hicieron “una copia al carbón de un cromosoma existente”, sino una “versión extensamente modificada y diseñada por computadora utilizando un grupo de principios que predice cómo fabricar una levadura sana y feliz.”

La manipulación de la levadura para otorgarle propiedades diseñadas sintéticamente puede ayudar a crear mecanismos mucho más económicos para el desarrollo de medicamentos y combustibles, por ejemplo, así como para mejorar la resistencia de la levadura al medio ambiente y generar fermentación de forma más eficiente. Por otra parte, los investigadores trabajan para controlar el resto del genoma de la levadura, no solo un cromosoma, lo cual esperan conseguir en los próximos dos o tres años.

En comentario publicado por The Verge, Jef Boeke, biólogo molecular coautor del trabajo, respondió a la esperada crítica sobre la manipulación genética haciendo referencia a que desde el origen de la humanidad ha ocurrido selección artificial de organismos debido a que el hombre ha ayudado a prosperar aquellos que son más favorables para su propia sobrevivencia, algo conocido como ‘domesticación‘. Por otra parte, Boeke asegura que el diseño del cromosoma artificial fue diseñado para autodestruirse cuando se vuelve demasiado caótico, con lo cual se reduce cualquier riesgo al mínimo.

Mientras que un cromosoma no puede considerarse vida sintética aún, es un paso radical para conseguirlo. No hablamos de inteligencia artificial consciente o un robot, sino de un organismo biológico diseñado en una computadora.

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